miércoles, 23 de enero de 2008

La izquierda evanescente, la izquierda Torrente

Multitud de encuestas a lo largo de los últimos años dejan claro que, sociológicamente, España es un pais de izquierdas. Entre el 68 y el 75%, de la gente, según la encuesta, se declara de izquierdas (más radical o más centrista, pero de izquierdas). Solo alrededor del 21% de derechas.

Es decir, entre el 68 y el 75% de la gente está a favor del divorcio sin esperar tres años para ello, del aborto, al menos en ciertas circunstancias, de la igualdad real de la mujer, y de la discriminación positiva para conseguirla, de la paridad hombre-mujer en los consejos de administración, de la conveniencia de que el Estado intervenga en la economia, sin necesidad de estatalizarla, de que se cuide el medio ambiente aunque nos suponga un esfuerzo, de no entrar en guerras y menos por petróleo, de no usar el terrorismo como arma electoral y tampoco para limitar las libertades ciudadanas, del matrimonio homosexual, de que el Estado ayude a quien más lo precise con leyes como la de Dependencia o el pago de una cantidad para alquiler de viviendas a jóvenes, del Estado laico, de la educación pública, de la sanidad pública, de que existan impuestos que no es algo malo y sirve para que el Estado pueda dar más servicios y apoyos, del Estado no centralista,...

O sea, que la izquierda debe sacar siempre alrededor del 75% de los votos ¿no?
Pues no.
¿Y por qué?
¿Es que esta gente luego le vota a Aznar?
No, eso no lo harían nunca. Pero se quedan en casa.

Si en un campo de fútbol tenemos a cien personas, setenta y cinco de ellas con chandal rojo y veinticinco con chandal azul y les pedimos que voten su color favorito (el de su chandal),... pero también pueden no votar, podría pasar lo siguiente: Los de azul votan todos al color azul. Pero solo la tercera parte de los que llevan chandal rojo votan. Los otros dicen que están cansados, que total para qué, si qué más da,...
De los veinticinco de rojo uno se cae por el camino y se tuerce un tobillo, con lo cual se retira.
Resultado final: Azules 25, rojos 24 y 51 abstenciones. Ganan los de azul, que dirán "la mayoría ha preferido que gobernemos los de azul...".

Si; inmensa mayoría de izquierdas. Pero hay una izquierda evanescente. Una izquierda que desaparece. Es fantasmal.

Otro ejemplo: una chica está hasta las narices del PP, de sus manifestaciones ultrafachosas, de los obispos, de la guerra, de todo el día dando la matraca con el terrorismo, de que lo quieran privatizar todo, de que persigan a las mujeres que abortan legalmente, de lo soez y delictivo de sus medios de comunicación, de que nos mintiesen con el 11-M,...
Vale, pues esta chica decide comprarse un reproductor de mp3 y va a una tienda.
Ve varios modelos y al final elige uno en que le caben (calcula ella) 85o canciones, por las que ni las compañías ni los artistas, ricos o pobres, van a cobrar un euro. ¡Joder, bajarme 850 canciones del e-Mule por el morro y oir música a tutiplén!
Le cobran 80€ por el reproductor. Pero, de repente, exclama... ¡qué es esto!. Observa que le cobran también 1,5€ en concepto de canon digital. ¡Qué morro tiene Zapatero! ¡Hala pues ya no le voto!¡Que se joda!¡Todos los políticos son iguales!

Os juro que esta izquierda existe. Tu le arrimas una alcachofa a uno o una de estos y se pone a presumir de izquierdismo. Pero a la hora de votar se busca las mañanas para cabrearse y no votar.

Ayer un amiguete, que se perfectamente que es izquierdoso, me dijo que no sabía si iba a votar porque el PSOE, no ha apoyado lo suficiente al Frente Polisario. Casi me desmayo allí mismo.

Dos chicas discutían en la Renfe. Una decía que no había que votar porque Zp no había bajado el precio de los pisos y que ella no se podía comprar uno con su novio. La otra le explicaba que hace 80 años o así que los pisos suben de precio todos los años, sin parar... hasta ahora en que comienzan a bajar. Pero la otra. ¿Y a mi qué, siguen siendo muy caros?. Y la primera: Pero bueno, ahora están bajando, son carísimos pero están bajando, tu ¿qué quieres?¿qué te regale uno el gobierno?...
Pero la otra movía la cabeza diciendo, "déjate, son todos igual". Y la primera: Pero si con Aznar subieron en ocho años casi un trescientos por cien, uno que valiese 20 millones de pesetas pasó a valer más de cincuenta kilos y ahora en cambio, están empezando a bajar ¿cómo va a ser igual?

"No han hecho nada" te sueltan. Y se quedan con sus conciencias tan tranquilas. Dicen: No dan becas (se han duplicado en estos cuatro años), no hay curro (hay menos paro que nunca desde que hay democracia en España) y el que hay es una mierda (la temporalidad ha descendido por primera vez y ya hay más contratos fijos que temporales entre los jóvenes), el transporte público es una mierda y es carísimo (puede pero, con excepciones, es de las Comunidades Autónomas, no del Estado), no ha sabido frenar a la Iglesia (encima de moderados apaleados por los dos lados, por los obispos y sus secuaces y por los valientes ateos de boquilla),...

Pero bueno, es igual, si se quedan si argumentos dirán que no se apoya al Frente Polisario.

Es la IE ó IT. O sea, la izquierda evanescente, la que se evapora. O biem, la izquierda Torrente. Porque lo del Polisario es de Torrente.

La derecha va a votar llueva o granice. Van desfilando. Da la impresión de que votan cabreados con todos, pero sobre todo con la gente moderada, odian a los moderados.

El PP va a sacar alrededor de 9,5 millones de votos. Son los que son. No pueden crecer, pero van TODOS. Les da igual quién se presente. Lo de Gallardón no les va a afectar lo más mínimo. ¿Es que algún votante del PP lee El Pais? Votarían los mismos si presentasen en las listas a Girón, Blas Piñar, Millán Astray y Arias Navarro todos de la mano.

Por el contrario el PSOE oscila en una franja increíoble, entre los 7,5 y los 11,5 millones de votos. ¡Cuatro millones de votantes evanescentes, que lo mismo votan que no!

El votante de la derecha piensa poco. Más adrenalina y menos mariconadas. No se vota conel cerebro, se vota "por cojones" y para dmeostrar que "nosotros tenemos más cojones que ellos".

La izquierda piensa. Eso es bueno. Eso nos diferencia. NO hay que darle cheques en blanco a nadie.

Lo malo es que a veces en vez de reflexionar lo que hace la IE ó IT es EXAMINAR a la izquierda. Y con una dureza inusitada. Y el canon digital, el Frente Polisario o que la inflación subra tres meses (después de estar controlada los cuarenta anteriores) pesa tanto como la guerra, la corrupción, el chantaje, el manoseo del terrorismo, el odio y el totalitarismo que representa el PP.

O sea, que lo que pasa en realidad es que no hay tanta gente de izquierdas. Dicen ser de izquierdas pero no lo son. Si te da igual una cosa que otra, no eres de izquierdas.

Es cruel la vida. Después de ocho años de negrura, un gobierno que no es fantástico pero si más que decente, y que ha resultado bastante eficaz, está a punto de perder el poder por la pereza de los suyos.

La gente de Pan Bendito, de San Blas, de Vallecas, de Zofio, de Villaverde, de San Cristóbal,... esa gente, votando o no votando es la que decide quiçén gana las elecciones. Pero, sorprendentemente, da la impresión de que les da igual.

Si tenéis algo de entusiasmo por un proyecto de progreso...¡hay que mover el culo, que la cosa pinta bastante mal! Pero nuestra ventaja es clara: podemos crecer muchísimo, el PP solo podrá mirar.